• Judita Palenikova, Nutricionista, República Eslovaca
    Judita Palenikova, Nutritionist - Slovak republic.

    Muchos padres se preguntan qué impacto tiene la dieta en el la dermatitis atópica de sus hijos. ¿Qué comidas debemos evitar o potenciar? La nutricionista Judita Palenikova explica por qué una dieta antiinflamatoria puede ayudar a atenuar los síntomas. 

    Judita Palenikova, Nutritionist - Slovak republic.

Reducir la inflamación 

Según Judita Palenikova, 'una dieta antiinflamatoria beneficia al eczema atópico. Las recomendaciones dietéticas relacionadas con esta enfermedad no solo son restrictivas. ¡Todo lo contrario! El objetivo debería ser incluir en la dieta de tu hijo tantos alimentos nutricionalmente ricos como sea posible.

Aunque una dieta antiinflamatoria ayuda a combatir la inflamación, una dieta sana en su conjunto es obligada’. En este artículo queremos desvelarte las claves para una dieta antiinflamatoria. La nutricionista te recomendará ciertos alimentos a evitar y cuáles potenciar.

 Aunque una dieta antiinflamatoria ayuda a combatir la inflamación, una dieta sana en su conjunto es una obligación

Evitar alimentos que causan inflamación

  • Grasas saturadas: grasas animales (carnes rojas, cerdo, aves de corral, mantequilla, grasa de cerdo), productos lácteos ricos en grasas (evitar los productos lácteos bajos en grasas para niños pequeños). Mejor una combinación de lácteos grasos y lácteos bajos en grasas. 
  • Azúcares simples: dulces, bebidas edulcoradas, miel… Pero la fruta tiene su lugar en una dieta antiinflamatoria.
  • Productos con harina blanca: no contienen suficiente fibra (que ralentiza la absorción de glucosa en el torrente sanguíneo y previene picos rápidos) y contribuyen a un mayor riesgo de enfermedades metabólicas, entre ellas la inflamación sistémica. El trigo sarraceno, el mijo y la harina de espelta son mejores para los niños que el trigo integral. 
  • Grasas transaturadas: margarinas, pasteles, tartas, comida rápida…
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Alimentos antiinflamatorios recomendados

  • Verduras y frutas: las frutas del bosque son ideales (a excepción de las fresas), ya que a menudo no son alérgenas y no contienen mucho azúcar. Las frutas del bosque incluyen principalmente uvas, arándanos, frambuesas, pasas de Corinto y moras. Es positivo añadir melocotones y albaricoques y, para más variedad, todas las demás frutas toleradas.

  • Frutos secos y semillas: nutricionalmente, los más importantes son las nueces, las avellanas y las almendras. En cuanto a las semillas, procura servir linaza, que es rica en ácidos grasos esenciales y vitamina E.

  • Pescado graso: el pescado es un gran ejemplo del hecho de que no todas las grasas son insalubres. Son una abundante fuente de ácidos grasos omega-3, que poseen excelentes propiedades antiinflamatorias y mejoran la inmunidad.

  • Alimentos con un alto contenido en bacterias probióticas: lácteos fermentados, kefir, yogur… A menudo los complementamos con probióticos durante una dieta antiinflamatoria.

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La clave: una dieta variada

En el caso de los niños, la idea de una dieta puede malinterpretarse, e incluso resultar inquietante. Sin embargo, Judita Palenikova esclarece sus recomendaciones: 

‘Es crucial tener en cuenta que seguir varias tendencias dietéticas puede arrebatar a la dieta de tu hijo los alimentos antiinflamatorios que más necesita”.

Por tanto, no te centres solo en lo que excluyen, sino en lo que aportan a su dieta. Fíjate en la variedad que puedes ofrecerle pese a las limitaciones y restricciones. Anima a tu hijo a comer de manera que su dieta sea la fuente de una rica variedad de propiedades antiinflamatorias’. 

RECUERDA

  • Una dieta antiinflamatoria puede tener un efecto positivo en la piel atópica en niños.
  • Decántate por platos preparados en casa, frutas y verduras.
  • Evita el azúcar y las grasas saturadas.